En momentos difíciles honra tus emociones, es la mejor manera de afrontarlos.

El saber honrar tus emociones es una de las claves principales para liderar de manera óptima un grupo de trabajo.

Un verdadero líder conoce la manera de como tratar a un equipo de trabajo de forma colectiva e individual. Siempre en búsqueda de aprovechar la capacidad de producción  de cada uno para obtener un ganar-ganar.

Un líder que honra sus emociones se percata cuando hay una situación irregular que debe maniobrar con algún miembro de su equipo de trabajo. Afrontandolo de la forma más imparcial aun cuando sepa que la inconformidad presentada es hacia él.

Quien honra sus emociones comprende de una manera más efectiva a quienes lo rodean. Lo que lo hace una persona confiable porque primero escucha y luego toma una decisión. 

En el Instituto de Imagen, Etiqueta y Liderazgo de Sylvia Villarreal, te enseño como regir tu vida de modo profesional y personal honrando tus emociones.

No siempre se puede evitar sentir emociones negativas pero, si tienes la oportunidad de decidir cómo expresarlas. 

Dejar salir las emociones negativas en un momento de arrebato puede costar muy caro. 

Es muy importante saber cuidar las emociones ya que se puede volver en contra de quien no lo logra hacer, debido a que se traduce en una persona susceptible que solo tiene conflictos con quienes le rodean.

Siendo así pues no es funcional en un equipo de trabajo porque no ayuda a la armonía laboral que debe existir. 
A continuación de doy unos tips que doy en mis cursos para que sepas cómo controlar la situación y honrar tus emociones:

• Mantener la calma es lo más importante, con mente fría se analizan mejor las circunstancias.

• Respirar profundamente te ayuda a centrarte en ti y te recuerda que puedes elegir cómo expresarte. 

• Hablar con las personas implicadas y exponerle tu punto de vista hará que te sientas mejor.

• Escucharse en la tranquilidad te ayuda a ver la situación menos grave y logras hablar sin caer en arrebatos.

Como ser humano te puedes molestar en una situación que te parezca injusta o que te agote algo repetitivo. Estás en todo tu derecho de hacerlo pero, sacarlo de manera intempestiva puede acarrear una serie de consecuencias contraproducentes innecesarias.

Por ello es que debes honrar tus emociones, pensando en cómo podrían sentirse los que te rodean si reaccionas en vez de tomarte tu tiempo. Medir antes de decir o hacer algo que cause una profunda herida.

Si sientes la necesidad de hablar con alguien, hazlo con una persona de confianza que te sirva de guia.

Sin embargo a veces solo con el hecho de ser escuchado, se ven los problemas menos grandes.

Enfocarte en la solución, hará que veas la situación diferente ya que no te quedarás enganchado en la molestia.

En el Instituto de Imagen, Etiqueta y Liderazgo de Sylvia Villarreal, te enseño como aplicar las herramientas necesarias que te dan ventaja en una situación de vulnerabilidad. 

Al honrar tus emociones, logras reconocer mejor tus sentimientos, lo que te ayuda a dejarlas fluir.

También logras una mayor comprensión hacia los demás lo que favorece las relaciones. Incluyendo tu relación contigo porque dejas de hacerte víctima y lejos de sufrir o molestarte, te vuelves alguien que soluciona, aportandote claridad y sosiego.

Ante una emoción fuerte de molestia o inconformidad, piensa que es mejor  discutirla desde la tranquilidad que tener que remediar algo que posiblemente cueste mucho volver a ser como antes. 

Ten presente que somos dueños de lo que callamos y esclavos de los que decimos.

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